Cáritas Diocesana de Tenerife expresa su dolor por el fallecimiento de Monseñor Bernardo Álvarez, al que agradece sus años de servicio y dedicación
Fuimos testigos de su cercanía, su sencillez y su amor paternal, que hicieron que nos sintiéramos como una verdadera familia en Cristo
En nombre de todas las personas que forman Cáritas Diocesana de Tenerife queremos expresar nuestro dolor por el fallecimiento de nuestro obispo emérito Monseñor Bernardo Álvarez, que ha partido hoy a la Casa del Padre.
Aprovechamos también para mostrar nuestro más sentido agradecimiento por los años de servicio y dedicación que entregó a nuestra Iglesia. A lo largo de su ministerio, fue un verdadero pastor, guiándonos con sabiduría, inspirándonos con su fe inquebrantable y fortaleciéndonos con sus oraciones.
Su pasión por compartir el Evangelio y su compromiso incansable con Cáritas y las personas más vulnerables han dejado una huella imborrable en los corazones de todas las personas que tuvimos el privilegio de acompañarle en su tarea.
Sencillez y amor paternal
Fuimos testigos de su cercanía, su sencillez y su amor paternal, que hicieron que nos sintiéramos como una verdadera familia en Cristo. Le agradecemos también el que siempre estuviera presente en los momentos alegres y en los difíciles, ofreciendo consuelo y esperanza a todas las personas que acudían a él.
Gracias por tanto, Don Bernardo. Que Dios lo colme de bendiciones y que nuestra Santísima Madre lo acompañe siempre.



